El magnate noruego Olav Thon y su vida hasta los 101 años
Hay personas que acumulan miles de millones y buscan disfrutar de esa fortuna hasta sus últimos días. A veces, el dinero parece no alcanzar para todo lo que se quiere hacer, pero hay quienes logran dejar una huella imborrable en el mundo.
Uno de esos casos es el de Olav Thon, un multimillonario europeo que vivió hasta los 101 años. Originario de Noruega, se destacó por tener un patrimonio impresionante y por disfrutar de su riqueza hasta muy avanzada edad, lo que lo convierte en un personaje fascinante de la actualidad.
Desde pequeño, Olav mostró una ambición sobresaliente. A los ocho años, ya hacía negocios vendiendo tarjetas navideñas a sus vecinos. Este espíritu emprendedor no lo abandonó. A los 16 años, se mudó a Oslo y abrió su propia tienda de pieles. Para 1966, su primera inversión inmobiliaria ya estaba en marcha, dando inicio a su carrera como magnate de bienes raíces, no solo en Noruega, sino en toda Europa.
Con el tiempo, Olav se consolidó en el ámbito empresarial y apostó por Unger Fabrikker AS, una fábrica de productos químicos. Esta jugada lo convirtió en la segunda persona más rica de Noruega para 2007. Su fortuna se estimó en unos 6 mil millones de dólares hasta 2014, según Forbes.
Un detalle interesante es que a los 91 años, decidió destinar toda su riqueza a un fideicomiso para fundaciones dedicadas a la investigación médica, ya que no tenía herederos. Su vida culminó el 16 de noviembre de 2024, dejando un legado no solo económico, sino también en el ámbito de los deportes extremos, siendo un gran impulsor de la Asociación Noruega de Senderismo.
Esta es solo una muestra de cómo Olav Thon, con su historia peculiar, nos recuerda que la vida no solo se mide en cifras, sino también en las decisiones que tomamos y en cómo elegimos dejar nuestra huella en el mundo.